Un señor muy ingenioso de apellido Biro nació en Hungría en 1899. A los dieciséis años le tocó participar como soldado en la Primera Guerra Mundial. Luego, estudio un poco de todo desde ingeniería y medicina hasta mecánica dental. Sus ocupaciones también fueron muy variadas: fue periodista, corredor de autos, pintor, escultor, crítico de arte e hipnotizador. En 1940 emigró a la Argentina y adoptó nuestra nacionalidad; además, fue un inventor a tiempo completo y patentó más de 300 ideas, entre otras la birome, el lavarropa y la caja de cambios automáticos.
Cuando los jóvenes le pedían consejos, Biro respondía: "No dejen pasar la vida a su lado; sean conscientes del mayor placer que existe: la vida misma".
Alumnos de 3° A y B |
No hay comentarios:
Publicar un comentario